Declaración del Presidente Sobre el Aniversario de los Cambios en la Política con Cuba
Hace un año, anuncié que, después de más de cincuenta años, Estados Unidos cambiaría su relación con Cuba y adoptaría un plan que coloca los intereses de los pueblos de ambas naciones por delante de las actitudes obsoletas del pasado. Desde entonces, hemos tomado pasos importantes para normalizar las relaciones diplomáticas entre nuestros países – re-estableciendo relaciones diplomáticas y abriendo embajadas; facilitando más viajes y comercio; conectando a más estadounidenses y cubanos; y alentado el libre flujo de la información hacía, desde y dentro de Cuba. Estamos promoviendo nuestros intereses comunes y colaborando en asuntos complejos que por demasiado tiempo nos definieron y nos dividieron. Mientras tanto, Estados Unidos está en una posición más firme para involucrar a los pueblos y gobiernos de nuestro hemisferio. El Congreso puede apoyar una vida mejor para el pueblo cubano al levantar un embargo que es un legado de una política fracasada.
Hoy, la bandera de las estrellas y las franjas ondea de nuevo sobre nuestra embajada en La Habana. Hoy, más estadounidenses están visitando Cuba y relacionándose con el pueblo cubano que en cualquier otro momento en los últimos 50 años. Continuamos teniendo diferencias con el gobierno cubano, pero abordamos directamente estos temas, y siempre vamos a defender los derechos humanos y los valores universales que apoyamos a través del mundo. El cambio no ocurre de la noche a la mañana, y la normalización será un proceso complejo y a largo plazo, pero los últimos 12 meses son un recordatorio del progreso que podemos efectuar cuando marcamos el rumbo hacia un futuro mejor. Durante el próximo año, continuaremos en esta línea, y facilitaremos que los cubanos y los estadounidenses lideren el camino.