HOJA INFORMATIVA: Cooperación de EE. UU. con Centroamérica; reunión con los miembros del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA)
LA CASA BLANCA
Oficina del Secretario de Prensa
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10 de abril de 2015
HOJA INFORMATIVA: Cooperación de EE. UU. con Centroamérica; reunión con los miembros del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA)
En la Cumbre de las Américas en Panamá de 2015, el Presidente Obama se reunió con los líderes del los países miembros del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) y su Secretario General el 10 de abril para recalcar el espíritu de colaboración y el firme compromiso de EE. UU. con Centroamérica. La estrategia de participación de EE. UU. en Centroamérica promueve el objetivo de tener una región integrada económicamente que brinde a sus habitantes oportunidades en el ámbito económico, cuente con instituciones públicas más eficaces, transparentes y responsables, y garantice un entorno seguro para sus sus habitantes.
El Presidente Obama solicitó al Congreso USD 1,000 millones para el año fiscal 2016 destinados a apoyar la estrategia de participación de EE. UU. en Centroamérica en las siete naciones de América Central. Aunque Estados Unidos dará prioridad a la asistencia dirigida al triángulo norte (El Salvador, Guatemala y Honduras), nuestra estrategia se extiende a toda la región. La prosperidad y la seguridad de Centroamérica, así como sus oportunidades y desafíos, están ligados de forma inextricable al resto del hemisferio y tienen un impacto directo en toda la región.
Han pasado once años desde la firma del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y la República Dominicana (DR-CAFTA) en agosto de 2004, cuando nuestros países se comprometieron a promover el crecimiento económico, ampliar las oportunidades de inversión e intercambio comercial y fortalecer tanto la integración regional como la competitividad de los firmantes, que produjo resultados positivos para los siete socios de este bloque comercial.
Para crear oportunidades y reducir la pobreza, se necesitan tasas de crecimiento más altas y sostenidas. A pesar de los desafíos financieros a los que debió hacer frente la economía mundial en los últimos años, el comercio intrarregional entre los países de Centroamérica y la República Dominicana aumentó de USD 6,300 millones en 2010 a más de USD 8,000 millones en 2014. Las exportaciones de mercancías de EE. UU. a Centroamérica y la República Dominicana alcanzaron una cifra de USD 31,300 millones en 2014, lo cual implica un aumento del 99 por ciento desde 2004; las importaciones de EE. UU. de Centroamérica y la República Dominicana sumaron un total de USD 28,400 millones en 2014, un incremento del 60 por ciento durante el mismo período. Estos aumentos del flujo de intercambios comerciales son prometedores y es posible lograr un mayor crecimiento económico mediante una profundización de la integración económica.
En la reunión con los jefes de estado de los países miembros del SICA, el Presidente Obama animó a sus homólogos a impulsar la integración regional, promover el comercio y tener una estrategia de seguridad conjunta para toda la región. Además, subrayó que las probabilidades de lograr un crecimiento económico sostenido son mayores cuando un país posee instituciones democráticas transparentes y responsables de rendir cuentas, y cuando adopta un firme compromiso de proporcionar seguridad a sus ciudadanos.
Fomento de la integración y el crecimiento económico regional
La ubicación de Centroamérica en el cruce geográfico de nuestro hemisferio es un activo económico extraordinario. A fin de aprovechar al máximo esta ventaja, las naciones centroamericanas deberían seguir trabajando juntas para integrar y promover el crecimiento de sus economías mediante la reducción de las tarifas, la inversión en infraestructura e instalaciones fronterizas, la agilización de los procedimientos aduaneros y la colaboración mutua en asuntos como la energía. La región es el punto neurálgico de la iniciativa Conectando las Américas 2022, que ayudará a atraer inversiones en energías limpias y reducirá los costos energéticos gracias a la interconexión de los mercados de electricidad de la región. Estados Unidos acaba de instaurar un fondo de USD 20 millones para canalizar inversiones del sector privado a proyectos de energía limpia en el Caribe y Centroamérica. El fondo proporcionará financiamiento de primera fase con el fin de catalizar inversiones de mayor envergadura del sector privado para proyectos de energía limpia. Además, Estados Unidos colaborará con los países de Centroamérica y el Caribe mediante la formación de un grupo de trabajo que evaluará nuestro progreso en el ámbito de la cooperación energética e identificará medidas concretas para impulsar las reformas del sector energético, la integración regional y el desarrollo de energías limpias.
Los diferentes países deberían acelerar los avances en materia de calidad y acceso a la educación, oportunidades de aprendizaje de oficios y establecimiento de modelos de desarrollo de pequeñas empresas a fin de fomentar la creación de empresas y promover un crecimiento económico general y equitativo. Mediante la mejora de la gestión de las finanzas públicas, los gobiernos también estarán mejor equipados para realizar inversiones públicas clave, brindar servicios públicos fundamentales, mejorar la transparencia fiscal y, con el transcurso del tiempo, disminuir la necesidad de recibir fondos provenientes de donaciones internacionales. La profundización de la integración regional también puede ayudar a dichos países a tener una mayor capacidad de resistencia a la hora de enfrentarse a acontecimientos desestabilizadores, como es el caso de los desastres naturales (por ejemplo, mediante esfuerzos colectivos para estar asegurados contra dichos riesgos).
Cooperación para la prevención de la violencia y para combatir el delito
La participación de EE.UU. en la seguridad complementa los esfuerzos de los países anfitriones y donantes con ideas semejantes para reducir los niveles de delincuencia y violencia, fortalecer las instituciones del estado de derecho, y ayudar a ocuparnos de las causas centrales de la falta de seguridad que impide un desarrollo más amplio de la economía y la inclusión social. Nuestros programas en Honduras, El Salvador y Guatemala ampliaron los esfuerzos de los gobiernos locales para promover la prevención de delitos y el aumento de la capacidad policial en las comunidades más adversamente afectadas. Estamos unidos de manera similar en nuestros esfuerzos por combatir el delito transnacional organizado, incluso mediante el suministro de apoyo para mejorar la interdicción en las fronteras terrestres y marítimas en toda la región, y cooperar con naciones asociadas para investigar y enjuiciar a aquellos que cometen operaciones de contrabando humano explotando la desesperación de los padres y los niños que hacen un viaje peligroso hacia el norte. En Panamá, la Regional Border Management Academy conduce la capacitación de oficiales fronterizos, mientras que en Costa Rica, nuestra asistencia a prisiones, capacitación policial en la frontera, y apoyo para el uso a nivel nacional de la vigilancia policial motivada por datos los está posicionando como un modelo regional.
En noviembre de 2014, el Departamento de Estado de Estados Unidos anunció su programa de procesamiento de refugiados en el país en El Salvador, Guatemala, y Honduras. El programa es parte de la respuesta de la Administración del Presidente Obama a la última entrada de niños no acompañados y de familias que estaban escapando a Estados Unidos desde Centroamérica y trabajará para proporcionar una alternativa segura, legal y ordenada al viaje peligroso que algunos niños están emprendiendo actualmente a los Estados Unidos. El nuevo programa permite que los padres de estas naciones, que están legalmente en los Estados Unidos, presenten una solicitud para que sus hijos se unan a ellos en los Estados Unidos si califican para el estatus de refugiado o para la admisión condicional humanitaria.
Mantenimiento de los progresos económicos y de seguridad mediante el gobierno responsable
El ambiente propicio para el crecimiento sostenido, la estabilidad y la prosperidad para la región requerirá buen gobierno, incluido el apoyo para los valores democráticos, el fortalecimiento de la justicia penal y de otras instituciones legales para combatir la impunidad y promover el estado de derecho, y hacer avanzar los derechos y protecciones para la sociedad civil y los medios. El sector privado, los dueños de pequeñas empresas y los inversores internacionales quieren tener confianza en la seguridad de sus inversiones y garantías de que los tratos comerciales sean justos y legales. Las instituciones deben establecer un patrón de transparencia, responsabilidad e independencia.