A medida que la reforma migratoria de sentido común evoluciona del Senado a la Cámara de Representantes, una creciente coalición de funcionarios electos de todas partes del país está exhortando al Congreso a que arregle nuestro sistema que no funciona. El mes pasado, recibimos la opinión de funcionarios estatales y locales bipartidistas del sur, suroeste, nordeste, oeste, y medio oeste sobre por qué ellos apoyan la reforma migratoria y cómo esta ayudará a sus comunidades. En las últimas semanas, los funcionarios electos estatales y locales han intensificado aun más sus esfuerzos por exhortar la acción del Congreso.
Los funcionarios electos estatales y locales entienden que la reforma migratoria de sentido común es la política correcta para nuestro país y tiene buen sentido económico para las familias de clase media. A principios de este mes, la Casa Blanca dio a conocer un informe que destaca los numerosos y diversos beneficios económicos de arreglar nuestro sistema de inmigración que no funciona, incluyendo contribuir a fomentar nuestra economía con la creación de nuevos negocios y empleos.
Ayer, la Directora del Consejo de Política Nacional de la Casa Blanca, Cecilia Muñoz, habló sobre los costos económicos locales de la inacción para el nivel federal:
"Debido a que el quid del asunto es que, mientras el Congreso y el gobierno federal tienen la autoridad de establecer la ley de inmigración y hacerla cumplir, los gobiernos locales viven con los resultados de lo que el Congreso haga y deje de hacer."
A continuación presentamos algunos de los funcionarios electos que recientemente agregaron sus voces en apoyo a la reforma migratoria de sentido común:
El 17 de julio, los gobernadores de 15 estados enviaron una carta al Congreso exhortándolo a aprobar la reforma migratoria de sentido común y destacando los beneficios económicos para sus respectivos estados.
"Todos reconocemos que los inmigrantes contribuyen mucho a nuestra economía y nuestra cultura. Debemos cerciorarnos de que ellos estén completamente integrados a la fibra social, cívica y económica de la vida americana y tengan acceso a las mismas oportunidades para tener éxito que tienen todos los demás. Como gobernadores, los exhortamos a que adopten la legislación de reforma migratoria integral bipartidista que refleja los valores de nuestra nación y contribuye al crecimiento de nuestras economías.”
Después que el Senado de EE.UU. aprobara un proyecto de ley integral de inmigración el 27 de junio, la Conferencia de Alcaldes de EE.UU. emitió la siguiente declaración:
“Los alcaldes de la nación elogian la aprobación decisiva por parte del Senado de la legislación bipartidista que reparará nuestro sistema de inmigración que no funciona. Exhortamos a la Cámara de Representantes a que siga la firme iniciativa del Senado y adopte la legislación de reforma migratoria integral bipartidista este año. Esto es lo que debe hacerse por nuestras familias, nuestras ciudades, nuestra economía y nuestro país.”
A raíz del voto por el Senado de EE.UU., la Asociación Nacional de Condados (NACo) también expresó su opinión en nombre de los funcionarios condales de todos los Estados Unidos:
“NACo elogia al Senado de EE.UU. por aprobar la legislación bipartidista que ofrece la mejor oportunidad en muchos años para hacer reformas que llevan mucho tiempo pendientes a nuestro sistema de inmigración que no funciona. NACo apoya muchas de las disposiciones clave del proyecto de ley, incluyendo el camino a ganarse la ciudadanía, modernizar el sistema de inmigración legal, un programa sensato de trabajadores temporales, y mejorar la seguridad de la frontera.”
Un grupo bipartidista de procuradores generales de 35 estados y territorios le enviaron una carta al Congreso expresando su apoyo e indicando el valor de una fuerza laboral más numerosa:
“Nuestro sistema de inmigración tiene que ser lo suficientemente flexible para cubrir las necesidades de los negocios en los diversos estados, con la participación del estado, mientras que protege los intereses de los trabajadores. Esto incluye un sistema de visado que sea tanto receptivo como efectivo para satisfacer las demandas de nuestra economía. También debe reconocer las contribuciones económicas beneficiosas que hacen los inmigrantes en calidad de trabajadores, contribuyentes y consumidores. Nuestras políticas de inmigración, cuando sea posible, deben tener como prioridad el hecho de mantener juntas a las familias, con el fin de garantizar el ambiente familiar de mayor apoyo para todos los niños en nuestro país. Nuestras políticas de inmigración tienen que proveer una manera sensata de manejar a los inmigrantes que viven actualmente en el país sin tener un estado legal pero que demuestren buena conducta, paguen impuestos y estén comprometidos a continuar contribuyendo a nuestra sociedad.”
Por último, la Liga Nacional de Ciudades, que representa a más de 19,000 municipalidades en todo el país, también le ofreció su apoyo al proyecto de ley aprobado por el Senado:
“Esta legislación ofrece una solución de sentido común a nuestra estructura que no funciona, y les da esperanza a los líderes de las ciudades a través del país que tienen que enfrentar diariamente las consecuencias del sistema actual fragmentado. El voto [del Senado] afirma lo que nuestros residentes nos han estado diciendo, ¡que el momento de la reforma es ahora!”
Los funcionarios estatales y locales experimentan de primera mano los impactos de un sistema que no funciona, y sus voces proveen una perspectiva útil en el debate nacional sobre la reforma migratoria. En las próximas semanas, continuaremos resaltando sus opiniones y la función que desempeña la inmigración en la creación de economías estatales y locales sólidas.
Para más información, visite la página de inmigración de la Casa Blanca.
David Agnew es Ayudante Adjunto del Presidente y Director de Asuntos Intergubernamentales.